El otro día se me rompió una cuchara de madera, de las típicas de cocina. Como están de moda las agujas de punto y crochet de madera, le dije a mi marido que me hiciese uno, y ahí estamos:
Por aquí no se tira nada:
Y ahora ando recogiendo ramas para qué me haga esto:
Jajaaja, lo tengo loco
GEnial! Si consigues unas así de grandes no dejes de fotografiarlas para el blog!
Besos.
Siii, sí lo conseguimos hago foto
Jajaaaa… se lo voy a enseñar a mi maromito para que no se queje tanto cada vez que le pido algo.
Salió química 😉
jajaja muy buena idea!! hay que reciclar siempre!
Yo lo intento al máximo
Qué chulo!! y qué bien dispuesto tu marido. Además no se le da nada mal!! Besos
A él le encanta, es su válvula de escape
Una estatua se merece tu marido.
No te cuento las que me merezco yo 😉